Para Carlitos...

Quien sabe como habrán sido tus manos?

Tus ojos eran así como los mios?

Te habrás cansado sin siquiera empezar?

O tal vez, ya sabías todo?

Y el tiempo te sobró...

No... Ya sé! Me allanaste el camino.



In Memoriam, para mi
pequeño hermano...

Recuerdos de Mendoza

Para las 3 Margaritas,
con todo mi amor.


Es de noche. La luna sale majestuosa por entre los picos nevados de estas montañas.
Se escucha a lo lejos, los rumores de los ríos que se unen y se alejan.
De repente, la brisa fría nos envuelve la cara... Y ahí estamos nosotras, pequeñas ante tanta inmensidad, tanta maravilla, tanta paz.
Gracias. Es en lo único que puedo pensar.
Se alinearon los planetas y en un suspiro somos parte de todo y somos una nada.
Ya no somos vos. Y yo. Y nosotras. Somos parte de todo, una unión que no encuentra palabras que la signifiquen.
Gracias por este momento. Gracias por nosotras. Gracias por tanto camino recorrido. Gracias por tantos encuentros y tantas despedidas que nos trajeron hasta este lugar.

Hay momentos en la vida que quedan sellados a fuego en la memoria.
Momentos que designan destinos.
Instantes que marcan la diferencia vital y nos muestran blanco sobre negro, cual es la verdad.

Creo que este fue uno de ellos, un momento que nos inundó de certezas y esperanzas. Y nos mostró en todo su esplendor ese "algo más", que estuvimos buscando por tanto tiempo, por tantos días.

Que la aventura no termine, hasta que no termine la vida.

Estoy lista

Sin distracción, sin misterios...
Sin exageradas ostentaciones.
Sin llantos, ni carcajadas.
Sin perturbaciones, ni perturbados.

Sin herejías, ni destinos ciertos.
Sin predestinados, ni torturados.
Sin sufrimientos, ni esclavos.
Sin caminos viejos, ni historias repetidas.

Sin miedos, ni Macondos.
Sin bienaventurados, ni malditos...
Sin excusas, sin dolor.
Sin rabias, ni guerras perdidas.

Avanzar, sonriendo...
Con el sol en la cara.
Y el alma sabia.
Así, fácil...
Confiando.
Como una niña,
que jugando,
se tira al agua.

Ahí voy...