
¿Quién como vos,
para deshilar con tus manos
las ausencias de mi alma?
las ausencias de mi alma?
Sus ojos no mienten, lo sé...
Los he visto esperanzados y sublimes, aguardando el futuro, lo que está por venir.
Su bondad y su inocencia se transmiten ligeras por el aire y llegan como bendiciones a mis playas lejanas y sedientas de fortaleza y de fe.
Yo, aquí las espero expectante, sorprendida, como niña pequeña... Y sigo adelante, cada segundo, de cada día, como ella me enseñó ...
Y sigo... Buscando destinos, tratando de esquivar marejadas y tirando botellas al mar plenas de mensajes piadosos, aprendidos de su boca...
TKM MÁ